Creemos que antes del Pentecostés podemos hablar de Israel como el pueblo escogido y de Jehová como su Dios. Pero después del derramamiento del Espíritu Santo podemos hablar de LA IGIESIA de Jesucristo y de Jehová como nuestro Dios y Padre Celestial, de Jesucristo como nuestro Hermano mayor y Señor de Señores y del Espíritu Santo como nuestro Dios, mejor amigo y guía. De forma tal que cuando leemos en 1 Corintios 12:28 que Dios puso *EN LA IGLESIA*, primeramente apóstoles, luego profetas, etc…. no solo vemos los oficios ministeriales sino también una referencia al periodo posterior al Pentecostés.